Control de heladas con agua
Esta tecnología consiste en la instalación de aspersores que rocían constantemente la fruta durante las horas de helada, produciéndose una película protectora que no permite la congelación del interior del fruto o las yemas. Con esto se evitan daños desde la etapa de yema hinchada hasta fruta completamente desarrollada. Los aspersores tienen un caudal controlado, asegurando un mínimo gasto de agua.